Desfiles destacados de la Semana de la Moda de París: Loewe y el romanticismo de Victoria Beckham

La culminación de la Semana de la Moda

La Ciudad de la Luz cierra con broche de oro las presentaciones para primavera-verano 2026, tras los nuevos debuts en Milán, que incluyeron a Dario Vitales para Versace y Demna para Gucci, con un fashion film protagonizado por Demi Moore. También se destacó el desfile homenaje a Giorgio Armani, realizado en la Pinacoteca de Brera, así como el evento de L'Oréal París, donde brillaron embajadoras como Helen Mirren, Jane Fonda y Kendall Jenner. Ahora es el turno del prêt-à-porter francés, y la expectación es máxima.

¿Por qué tanta emoción? Principalmente por los numerosos debuts que se están llevando a cabo. El juego de tronos en el mundo de la moda parece haber llegado a su fin con el nombramiento de Maria Grazia Chiuri como nueva directora creativa de Fendi. Durante esta semana también podremos ver a Jonathan Anderson para Dior, quien ya presentó su colección masculina hace poco, y a Matthieu Blazy con su nueva propuesta para Chanel.

El calendario está repleto de grandes nombres: Stella McCartney, Isabel Marant, Loewe, Hermès y Victoria Beckham, entre otros. La moda se apodera nuevamente de París para cerrar este ciclo completo que volveremos a disfrutar en enero durante la próxima temporada.

Victoria Beckham ha reinventado esta temporada estival rindiendo homenaje tanto a su adolescencia como a su conexión con la figura materna. Su inspiración proviene principalmente de dos películas significativas en su vida: Romeo + Julieta y Las vírgenes suicidas, pilares fundamentales para su colección primavera-verano 2026.

Bajo la dirección creativa de Jack McCollough y Lazaro Hernández, Loewe presentó una colección vibrante llena de simbolismo. Este desfile fresco resaltó la artesanía del cuero en diversas formas, acompañado por un juego cromático imposible de ignorar.

Las combinaciones bicolor, chaquetas y vestidos arquitectónicos fueron protagonistas gracias al trabajo meticuloso con el cuero. Los bolsos también jugaron un papel crucial; destacaron los modelos tipo mano y mochilas diseñadas para ser lucidas más allá del hombro.

Isabel Marant reinterpretó su colección con un enfoque boho chic marcado por tonos tierra y verdes. Su savoir-faire artesanal se reflejó en tejidos como croché y cuero, complementados por delicados detalles transparentes.

Aportando una estética floral marina, Rabanne dejó atrás sus clásicas armaduras para ofrecer una visión más fresca. Los estampados inspirados en la costa dominaron muchos looks junto al característico aire futurista gracias a los metalizados.

Bajo Jonathan Anderson, Christian Dior presentó una colección que revisita los archivos del maestro Dior con un toque contemporáneo. Los vestidos lenceros, capas voluminosas y reinterpretaciones del New Look fueron algunos destacados del desfile celebrado en el Jardín de las Tullerías.

Nicolas Ghesquière tomó inspiración en Ana de Austria para crear una propuesta romántica llena de elegancia real visible tanto en largos vestidos como en turbantes decorativos.

No fue un desfile convencional; Stella McCartney utilizó esta plataforma para hacer activismo medioambiental mediante tejidos respetuosos con el entorno. Las siluetas arquitectónicas destacaron junto a una paleta cromática centrada en tonos vibrantes como rojo, lila y rosa.