Siete microhábitos saludables para una menopausia más llevadera

La menopausia: un nuevo capítulo en la vida de la mujer
La menopausia es una etapa más en la vida de la mujer, que antes se percibía como un final, pero hoy se considera una continuación. Este cambio de perspectiva ha llevado a muchas mujeres a cuidar su bienestar y calidad de vida. No es necesario recurrir a hormonas; pequeños cambios en los hábitos pueden hacer una gran diferencia.
Beatriz Crespo, especialista en bienestar y neurociencia, ha creado una metodología llamada Microhábitos saludables. Se trata de acciones breves, que no superan los dos minutos, que se pueden integrar fácilmente en la rutina diaria. Estas prácticas ayudan a regular el cuerpo, mejorar el estado emocional, aliviar sofocos y reconectar con el deseo.
Siete microhábitos para una menopausia tranquila
Crespo enfatiza que estos microhábitos no son tareas adicionales, sino rituales sencillos que promueven el bienestar. «Cuidarse no tiene por qué ser doloroso ni convertirse en una carga», afirma. Acciones simples como disfrutar de una ducha sin distracciones o saborear una infusión mientras respiras profundamente son ejemplos de cómo priorizar tu cuidado sin estrés.
«La menopausia no marca el final de nada; es el inicio de una nueva forma de vivir tu cuerpo. Con ciencia, deseo y libertad», asegura Beatriz Crespo. A continuación, presenta siete microhábitos que puedes adoptar para cuidar tu salud durante esta etapa:
- Respiración nasal consciente: Inhala y exhala por la nariz durante al menos un minuto cuando sientas estrés o sofocos. Concéntrate en tu respiración y cierra los ojos si es posible; esto ayudará a regular tu sistema nervioso.
- Agujeros fríos en muñecas y nuca: Para calmar los sofocos, aplica agua fría durante un minuto en las muñecas y la nuca.
- Microejercicio HIIT: Realiza un circuito breve con 30 sentadillas, 20 segundos de plancha y 10 flexiones. Esto mejora el metabolismo y reduce la fatiga.
- Kegels exprés: Realiza ejercicios de Kegel durante uno o dos minutos para fortalecer el suelo pélvico y mejorar la salud sexual.
- Exposición breve al sol: Sal al balcón o asómate a la ventana durante dos minutos para activar la síntesis de vitamina D, esencial para huesos fuertes y buen estado anímico.
- Bañito con manzanilla templada: Los baños de asiento ayudan a calmar irritaciones e hidratar zonas íntimas; son efectivos para el cuidado personal.
- Autocaricias conscientes: Dedica tiempo cada mañana o noche a acariciar tu cuerpo con atención para estimular tu erotismo personal.
Deja una respuesta
No te pierdas esto: