Por qué las sandalias son el calzado imprescindible del verano

El verano empieza cuando sacas las sandalias

Hay un momento del año en el que guardar las zapatillas y dejar que los pies respiren se siente casi como un acto de libertad. Las sandalias no solo anuncian la llegada del calor, sino que se han convertido en un símbolo de comodidad, frescura y, por qué no decirlo, de estilo. Si todavía dudas de su poder, sigue leyendo y verás por qué no hay verano sin sandalias.

Estilo para todos los gustos (y pies)

La variedad de sandalias es tan grande como las ganas de helado en agosto. Planitas, de cuña, con tiras finas, tipo gladiador, slides, con plataforma, de dedo… Si tienes un pie, hay una sandalia para ti (y si tienes dos, mejor, porque así puedes combinar).

Lo mejor es que cada modelo tiene su propia personalidad:

• Las sandalias planas son las reinas de la versatilidad. Van con todo y para todo: desde un paseo por la ciudad hasta una tarde de terraceo.
• Las de cuña son el truco infalible para ganar unos centímetros sin perder la comodidad (ni el equilibrio).
• Las de tiras finas aportan elegancia y ese toque chic que hace que cualquier look sencillo parezca pensado.
• Las slides (sí, esas tipo piscina) han saltado del vestuario deportivo a la moda urbana y ahora son tendencia absoluta.
• Las tipo gladiador vuelven cada verano para quienes quieren sentirse como una diosa griega, aunque solo sea para ir a por el pan.

Y si eres de las que no se decide, tranquila: puedes tener varias y nadie te va a juzgar. Si necesitas inspiración o quieres ver modelos, puedes echar un vistazo en esta web de sandalias.

Los estilos de sandalias más populares

Estilo	Características principales	Ideal para…
Planas minimalistas	Simples, cómodas, colores neutros	Todo el día, cualquier plan
Cuña	Altura y estabilidad	Salidas nocturnas, eventos
Slides	Sin cierres, muy fáciles de poner	Playa, piscina, looks casual
Gladiador	Tiras largas, look boho	Festivales, outfits bohemios
De dedo	Frescas, desenfadadas	Paseos, días calurosos

Comodidad y funcionalidad: tus pies también quieren vacaciones

Lo bueno de las sandalias es que no solo son bonitas, sino que también son cómodas (si eliges bien, claro). El diseño abierto permite que el pie respire, evita el sudor y reduce el riesgo de rozaduras. Además, son fáciles de poner y quitar, lo que siempre viene bien cuando tienes prisa por salir a disfrutar del sol.

Eso sí, no todas las sandalias valen para todo. Si vas a caminar mucho, busca modelos con plantilla acolchada, suela antideslizante y tiras ajustables. Si solo las quieres para estar mona en la terraza, puedes arriesgar un poco más con el diseño.

“Las sandalias permiten que el pie respire, y si eliges bien, pueden ser igual de cómodas que unas deportivas. La clave está en la sujeción y la calidad de los materiales.”

Y hablando de materiales, elige siempre opciones de calidad: piel, serraje, tejidos naturales… No solo duran más, sino que cuidan tus pies y evitan malos olores. Si eres de las que se preocupa por el planeta, cada vez hay más marcas que apuestan por la sostenibilidad, usando materiales reciclados o procesos de fabricación responsables.

Tendencias actuales: lo que se lleva este verano

Este año, la moda en sandalias apuesta por la naturalidad y la comodidad. Los colores neutros como el beige, blanco, negro y los tonos tierra están en todas partes, aunque los detalles metalizados y los estampados animales también tienen su hueco para las más atrevidas.

Las sandalias planas minimalistas son el must de la temporada, pero las de tiras finas y las slides siguen pisando fuerte. Y si quieres algo diferente, atrévete con modelos con flores 3D, aplicaciones o incluso sandalias con suela chunky (sí, esas que parecen sacadas de un videojuego retro).

¿Un consejo? Invierte en un par básico y otro más especial, así tendrás opciones para cualquier plan, desde el chiringuito hasta una cena elegante.

Consejos para elegir tus sandalias ideales

Elegir sandalias puede parecer fácil, pero si quieres que te duren todo el verano (y no solo hasta la primera caminata larga), sigue estos consejos:

• Busca la talla perfecta. Ni muy grandes ni muy pequeñas, que no sobresalga ni el dedo ni el talón.
• Prioriza la comodidad. Plantillas acolchadas, suelas flexibles y tiras que no rocen.
• Piensa en el uso. ¿Las quieres para caminar mucho? Mejor con buena sujeción. ¿Solo para la playa? Unas slides o de dedo irán genial.
• Elige materiales transpirables. La piel y los tejidos naturales son tus aliados.
• Atrévete con el color. Si tu armario es muy neutro, unas sandalias de color pueden ser el toque divertido que necesitas.

Un verano sin sandalias… es como una paella sin arroz

Las sandalias no son solo una moda pasajera: son el calzado imprescindible del verano. Combaten el calor, aportan estilo y, si eliges bien, son tan cómodas que tus pies te harán la ola. Así que, la próxima vez que dudes entre sandalias o cualquier otro zapato cerrado, recuerda: el verano está para disfrutarlo… ¡y tus pies también!